Impacto de la tecnología: ventajas y desventajas en nuestra vida laboral

En los últimos años, el profesional en Ciencias Económicas se encontró con nuevos desafíos y tuvo que adaptarse a nuevas plataformas, funcionalidades, formularios, y ello hizo que tuviera que especializarse necesariamente en nuevas tecnologías, ya que, si no lo hacía, iba a quedar unos pasos atrás de los otros profesionales ya especializados, que podrían absorber su clientela e ingresos.

Pero, ¿a qué se debió todo este gran cambio? La necesidad de disponer de información actualizada casi de inmediato, el crecimiento de almacenamiento de archivos compartidos en la nube y el cambio hacia el trabajo remoto por la pandemia del coronavirus hicieron que el eje de los profesionales del nuevo milenio impulsara desarrollos tecnológicos que permitieran adaptar la vieja profesión a una que pueda estar a la vanguardia.
 
Para que se impulsen desarrollos tecnológicos se tiene que detectar necesidades y/o problemas que requieren que algo que está vigente actualmente tenga que ser modificado o mejorado, ya que en muchos casos no se ha hecho una modificación de fondo, sino una mejoría sobre lo ya existente, como sucede con la nube, que amplió la cantidad de usuarios que pueden editar simultáneamente un archivo y la capacidad de almacenamiento.

La tecnología es algo positivo para el profesional en Ciencias Económicas
Este último ciclo de necesidades y problemas lo podemos llamar “un sin fin”, ya que, si bien hoy podemos detectar esa necesidad (o problema), seguramente, con los avances en la tecnología vamos a poder solventarla y llegar a una mejoría que haga que podamos cubrirla. Pero, a medida que pasa el tiempo (y cada vez con más frecuencia), se van detectando nuevas necesidades o problemas que necesitamos resolver y eso hace que la tecnología desarrollada previamente ya sea deficiente o quede por detrás de lo que los profesionales en Ciencias Económicas necesitan.

Si queremos entender con un poco más de profundidad cuáles fueron los impactos de la tecnología en nuestra profesión, podemos encuadrarlos en aquellos que nos aportaron ventajas y los que, sin lugar a dudas, nos trajeron desventajas en las tareas cotidianas.

Comenzando por las ventajas, podemos destacar las siguientes:
- Reemplazo de apps de escritorio por páginas web: sin duda alguna, el principal impacto de los avances tecnológicos fue la mejora en la forma en que presentamos la información de nuestros clientes. Como bien sabemos, por el volumen de información que tienen nuestros clientes, los nuevos requisitos exigidos por las diferentes entidades reglamentarias y la necesidad de tener la información disponible y actualizada constantemente, se reemplazaron varios de los aplicativos de escritorio que se usaban con anterioridad por plataformas que están montadas directamente sobre páginas web. Sobre ellas, el profesional puede hacer la carga de información, generar reportes, hacer declaraciones juradas, entre otras funcionalidades.
- Firmas y certificaciones digitales: en segundo lugar, podemos nombrar la posibilidad de hacer firmas y certificaciones de manera digital que tienen la misma validez que las antiguas, que se hacían de manera presencial, teniendo en cuenta que estas deben estar primero validadas y certificadas por el generador/usuario, así como si necesitan un respaldo de alguna entidad (por ejemplo, si se trata de una firma que esté relacionada con un trámite bancario y tenga que ser certificada por el banco interviniente).
- Home office: con la llegada de la pandemia de COVID-19 y la necesidad de que los empleados que trabajaban en las oficinas tuvieran que mantenerse en aislamiento en sus hogares, la metodología de trabajo home office fue uno de los avances más importantes que permitió la tecnología, haciendo que, en su gran mayoría, las empresas puedan continuar operando casi con total normalidad. Del total de empresas a nivel mundial, el 67% adoptó esta modalidad de trabajo y el 39% lo hizo de forma definitiva.
- Capacitación on demand: otras de las necesidades que surgieron con los avances tecnológicos para los profesionales en Ciencias Económicas es estar actualizados no solo con la tecnología para poder desenvolverse con autonomía en las diferentes plataformas y aplicativos online que surgieron en los últimos años, sino también con las regulaciones contables e impositivas que nos obligan a capacitarnos constantemente. Hoy en día, muchos cursos e incluso clases presenciales se almacenan en las plataformas para que, en cualquier momento o lugar, el profesional pueda consultar las veces que crea necesarias dichas grabaciones para capacitarse cuándo y dónde quiera.
- Automatizaciones: con el avance de la tecnología, especialmente en informática y robótica, muchos procesos que antes incluían trabajos manuales hoy pueden estar automatizados; por ejemplo, contabilidad, información, pagos y cobros, entre otros. Esto hace que los empleados que antes gastaban parte de su jornada laboral en tareas manuales y operativas hoy puedan capitalizar ese tiempo para dedicarles mayor análisis, proponer mejoras y estandarizar procesos que en un futuro puedan también encontrarse dentro del entorno de las automatizaciones.

Pero la pregunta fundamental es: ¿Todo lo que es tecnología aportó ventajas? No, ya que estos avances también trajeron desventajas, entre las que podemos mencionar las principales:
- Webs colapsadas: en relación con el beneficio de pasar desde apps de escritorio a procesos montados en webs, muchas de estas, más allá de que contaban con la infraestructura necesaria para poder realizar gestiones y trabajos, debido al volumen de información y cantidad de usuarios conectados de manera simultánea, se vieron colapsadas generando demoras en consultas, pérdidas del trabajo que se venía realizando, y hasta crearon la necesidad de correr vencimientos ya planificados en calendarios que se habían establecido a principio de año.
- Equilibrio de vida personal – trabajo: si bien las jornadas de trabajo prepandemia no eran excluyentemente estructuradas con relación a lo dispuesto en los contratos laborales, como de 9 a 18 horas (existían las horas extras desde un primer momento), con la llegada de la virtualidad, el home office y el tener a disposición los dispositivos laborales en casa (notebook, celular, entre otros), hicieron que muchos empleados no pudieran encontrar un equilibrio entre su trabajo y su vida personal, lo que se conoció como el famoso “no saber cuándo cortar”. Esto produjo que las jornadas de trabajo sean abusivas, los mails y mensajes se envíen en cualquier horario y los empleados no puedan encontrar los tiempos necesarios para tener una buena calidad de vida; por ejemplo, tener tiempo para su familia, amigos, tener hábitos saludables, hacer ejercicio, entre otros.
- Alta rotación laboral: si bien la tecnología no es la causa, sino más un condimento, el avance tecnológico, la virtualidad y la nueva generación de empleados con ambición de hacer cosas nuevas,  y tener más información disponible sobre qué se hace en otras empresas, conllevaron que muchas personas tomen decisiones precipitadas y, en un corto/mediano plazo, decidan hacer un cambio en su trabajo en búsqueda de nuevos desafíos y oportunidades. Si bien puede sonar más a un beneficio que a un perjuicio, esto, para las empresas significa incremento en los costos de Recursos Humanos, ya que deben salir a encontrar aquel empleado que reemplace a quien esté dejando el puesto y, al mismo tiempo, significa que se tenga que capacitar al ingresante para que pueda realizar las tareas que llevaba el anterior; por ello, su superior, o quien aún se mantenga en la compañía, tendrá que gastar parte de su tiempo en capacitación.
- RPA vs. contadores: si bien la robótica claramente fue uno de los avances tecnológicos más grandes de la historia, el RPA (por sus siglas en inglés Robotic Process Automatization), al permitir disminuir la carga en las tareas operativas, hizo que muchas fuerzas humanas puedan ser reemplazadas por un proceso automático a través de un robot, haciendo que varias empresas tomen la decisión de reubicar o hasta despedir empleados, pues la tarea que efectuaban anteriormente ya no era necesaria debido a la implementación de un RPA.

El profesional tiene el desafío de adaptarse y capacitarse constantemente para que pueda hacer de la profesión una de vanguardia

Entonces, ¿podríamos decir que la tecnología es algo positivo para el profesional en Ciencias Económicas? Claramente sí porque, si comparamos los beneficios con los perjuicios, la balanza nos muestra que es muy positiva. También conlleva que el profesional tenga el desafío de adaptarse y capacitarse constantemente para que pueda hacer de la profesión una de vanguardia que pueda ser partícipe de las profesiones del futuro.

Fernando Poyo

Accounting senior analyst en Mercado Libre